Oriundo de Valle de Allende, Chihuahua, Aldo Terrazas dejó hace algunos años el norte del país para vivir en Puebla, lugar al que llegó para estudiar en UMAD y jugar para los Tigres Blancos.
Él, como suele suceder con los jugadores novatos, tuvo pocos minutos en sus primeros juegos como parte del equipo que dirige el coach Juan Manuel Solano. Sin embargo, su dedicación, esfuerzo, talento y disciplina lo llevó a ser parte del primer acceso de UMAD a los Ocho Grandes, esto en la edición 2019 efectuada en el ITESM Hidalgo.
Después, tanto en lo académico como en lo deportivo vendría lo mejor en lo que va de su estancia en UMAD: la obtención de un título universitario, el ingreso a la maestría y tres campeonatos nacionales de la Liga ABE, uno en la División 2 y dos más en la División 1.
La nueva temporada de la Liga de la Asociación de Basquetbol Estudiantil marcará la recta final de la faceta de Aldo Terrazas como estudiante deportista, sin embargo, el maderista sabe que la vida es de ciclos, los cuales se cierran no sin antes dejar un gran aprendizaje.
“En lo personal me siento bastante bien porque gracias a Dios ya tengo una licenciatura y próximamente una maestría. Lo que el coach quiere de nosotros es que, a través del deporte, nosotros podamos estudiar y con ello contribuir a la sociedad; mis compañeros y yo nos identificamos con esta filosofía y afortunadamente varios de nosotros terminaremos nuestra etapa como deportistas colegiales con dos títulos universitarios, lo cual fue el objetivo cuando hace varios años dejamos nuestras ciudades natales”.
En lo deportivo, Aldo Terrazas se declara listo para jugar otra temporada en el nivel más alto del rubro estudiantil, uno que, día a día, partido a partido, le exige ser mejor dentro y fuera de la cancha.
“Jugamos la Copa ABE y ahí me sentí bastante bien. Considero que el trabajo que estuve haciendo y el trabajo de mis compañeros resultaron en un esfuerzo que le vino bien al equipo. Nos fue bien en pretemporada, pero podemos mejorar ya que siempre hay áreas de oportunidad que, si las trabajamos, nos harán más fuertes”.
Fuente UMAD